Recuerdo la primera vez que consideré el CBD. La mayor pregunta que me vino a la cabeza fue - "¿Cuánto CBD debería tomar realmente?". No quería excederme, ni quería malgastar mi dinero en una dosis demasiado baja para sentir un efecto real. Tras un periodo de pruebas y errores (y unas cuantas charlas con usuarios más experimentados y profesionales de la medicina), finalmente aprendí a calcular un rango de dosis que me funcionara.
Aspectos básicos
El CBD es un compuesto que se encuentra en la planta de cannabis. A diferencia del THC (componente psicoactivo), el CBD no es tóxico. Esto significa que puedes disfrutar de la relajación sin sentirte mentalmente afectado. La cantidad de CBD que necesita cada persona puede variar.
La dosis "correcta" de CBD no es un número universal. Depende de factores como tu peso corporal, metabolismo y las razones específicas por las que tomas CBD.
Factores que influyen en la dosis de CBD
- Peso corporal y metabolismo
Tu físico puede influir mucho en la rapidez con la que sientes los efectos del CBD. Las personas con un peso corporal más elevado o un metabolismo más rápido podrían necesitar una dosis un poco mayor. - Tolerancia individual
Algunas personas son más sensibles al CBD que otras. Es posible que ya tengas una mayor tolerancia si estás acostumbrado a tomar otros productos derivados del cannabis. Si eres nuevo en el consumo de CBD, es mejor empezar con un nivel bajo e ir subiendo poco a poco. - Potencia del producto
Una gominola puede contener 5 mg de CBD, pero una sola gota de una potente tintura puede tener 10 mg. Conocer el contenido exacto de CBD del producto es vital para garantizar que tomas una cantidad constante. - Motivos de uso
Necesita una dosis menor si sólo desea reducir el estrés diurno leve, pero podría optar por una dosis ligeramente mayor si intenta relajarse antes de acostarse.
Métodos de consumo y su impacto
- Tinturas y aceites
Se toman por vía sublingual (debajo de la lengua). El CBD suele entrar en el torrente sanguíneo con bastante rapidez. Hay efectos más rápidos que se pueden sentir en 15 a 30 minutos. - Comestibles
Las gominolas, chocolatinas y otros aperitivos son una opción sabrosa, pero tardan más en hacer efecto (30 min-2h). Tu sistema digestivo tiene que procesarlos primero. - Vapear/fumar
Vapear o fumar CBD puede ofrecer resultados casi instantáneos. Sin embargo, no siempre es la primera opción para todo el mundo. Especialmente si eres precavido con la salud respiratoria. - Tópicos
Las cremas, lociones o bálsamos pueden aplicarse directamente en las zonas afectadas. Esto las convierte en una excelente opción si lo que se pretende es atajar molestias localizadas.
Calcular la dosis inicial
Un punto de partida común es alrededor de 5 a 10 mg de CBD una o dos veces al día. Después de unos días, comprueba cómo se encuentra tu cuerpo. ¿Te sientes más relajado? ¿Ha mejorado el sueño? Si los efectos son imperceptibles, aumenta gradualmente la dosis en unos 5 mg. Ten en cuenta que el CBD puede tardar algún tiempo en acumularse en tu organismo, así que no apresures el proceso.
Examina la etiqueta del producto para calcular tu dosis inicial personal. Si una tintura de 30 ml contiene 600 mg de CBD en total, entonces cada gotero de 1 ml contiene aproximadamente 20 mg de CBD. En ese caso, podrías empezar tomando medio gotero y ajustar a partir de ahí.
Ajuste de la dosis
Encontrar el punto óptimo suele implicar un poco de experimentación. Llevé un diario sencillo para registrar mi dosis, la hora de consumo y cualquier efecto o efecto secundario perceptible. Al cabo de una o dos semanas, empecé a notar pautas. Si me sentía demasiado somnolienta durante el día, reducía la dosis unos miligramos. Si no notaba ninguna mejora en mis niveles de estrés, aumentaba la dosis gradualmente.
La clave está en dar a cada ajuste de dosis unos días para que se asiente. Si cambias de una dosis a otra con demasiada rapidez, te resultará difícil determinar qué es lo que realmente te funciona.
Consideraciones de seguridad
Siempre es mejor consultar con un profesional sanitario antes de incorporarlo a tu rutina diaria. Especialmente si estás tomando otros medicamentos o tienes problemas de salud subyacentes. Algunos efectos secundarios comunes (como la sequedad de boca o la somnolencia) pueden aparecer si se sobrepasa la dosis ideal. Afortunadamente, según mi experiencia, basta con reducir la dosis o espaciar las tomas para aliviar estos problemas.
Conclusión
Determinar la dosis de CBD adecuada para ti es cuestión de exploración personal. Puedes hacer del CBD una parte útil de tu vida sin conjeturas innecesarias. Tardé unas semanas en encontrar la dosis que mejor se ajustaba a mis necesidades. Una vez que lo hice, me sentí más segura y cómoda integrando el CBD en mi rutina diaria de bienestar.
Recuerde que el organismo de cada persona es único. Tu dosis perfecta puede ser diferente a la mía, pero con paciencia encontrarás el equilibrio que más te convenga. ¡Buena suerte en tu viaje hacia el descubrimiento de la dosis de CBD!